sábado, 23 de julio de 2011

Historia de la expulsión de colonos y descendientes japoneses en el Perú. La Segunda Guerra Mundial y el apoyo del gobierno de Manuel Prado Ugarteche a EE.UU.

El día que Perú pidió perdón a Japón por abusos cometidos en la II Guerra Mundial

El pasado 14 de junio, Perú, a través del presidente de la República, Alan García, pidió perdón a Japón por los abusos que nosotros, cometimos contra la sociedad japonesa durante la segunda guerra mundial, en donde nos alineamos con Estados Unidos y fuimos capaces de destruir lo que los inmigrantes ganaron honestamente desde 1899, día en que "oficialmente" data el primer ingreso de inmigrantes a nuestro territorio.

Por: José Miguel Silva

Quizás será imposible describir una historia tan fácilmente como la de los japoneses y sus descendientes en el Perú. Llegaron en 1899, ocupando aquel barco, el “Sakura Maru”. Fueron 790, aunque antes quizás algunos otros hijos del sol lograron pisar tierras peruanas. Llegaron y trabajaron en haciendas de manera honesta y ejemplar.

Los japoneses fueron, de esta manera, creándose no solo una imagen sino además anticuerpos propios de una sociedad que no se podía arrancar las “taras” del colonialismo.

Pese al recelo, y principalmente en las zonas costeras, los japoneses en Perú fueron creciendo y de esta manera pasaron a tener participación en sectores de la sociedad peruana de entonces.

Primero con bodegas y peluquerías, los descendientes de japoneses, ahora comprobadamente peruanos no la tuvieron más fácil que sus progenitores. Debieron lucharla de la misma manera, trabajando y ahorrando dinero de múltiples trabajos en horarios considerablemente polémicos.

Pero la sociedad nunca estuvo preparada para asumir esa realidad. El Perú de entonces tenía otras prioridades.

Inicio de los abusos

7 de diciembre de 1941 en que Japón le declara la guerra a Estados Unidos.

A partir de allí empezó otra historia, una llena de abusos y desprecios a miles de humildes japoneses. Aquella fecha, como era propio de un acercamiento político militar, Perú se alió a Estados Unidos e incluso se declaró la guerra al país del sol naciente.

Fue entonces en que los recelos de peruanos que veían en los japoneses un obstáculo- a su ya de por sí lento desarrollo- se convirtieron en realidades.

“Las listas negras y los campos de concentración”

De pronto se inició una persecución voraz contra los japoneses. No tenía mucho de iniciado el conflicto en el globo terráqueo y aquí se diseñaban “listas negras” que incluían nombres de japoneses o descendientes de dicho país que cumplan las condiciones para ser expulsados del país.

Dichos listados buscaban expulsar del país a los japoneses, contrarios de por sí a cualquier versión de patriotismo, pues Perú estaba aliado a USA y compañía) .

Básicamente el considerar a un japonés o (nissei y/o nikkei) como parte de un grupo de infiltrados que harían daño al Perú y deportarlo a campos de concentración, en Estados Unidos.

Allí, peruanos que forjaron su destino en nuestras tierras, se esforzaron de la misma manera que en Perú, pese a lo limitado de su espacio.

De esta manera los campos de concentración se tornaron en cerrados en donde no había más opción que la oficial.
Lo abusos a japoneses en Perú fueron centenares. Desde el cierre de colegios en donde se enseñaba japonés hasta quemas de viviendas ajenas. La crueldad preponderó.

Lima parece una ciudad que no sabe perdonar. Y tuvieron que pasar 70 años para que el Estado Peruano reconozca los abusos cometidos en el Perú en contra de los japoneses.

Una sola palabra: "perdón"

“Hoy día vengo a decirles como Presidente del Perú que personifica la Nación que pedimos perdón por ese grave atentado contra los derechos humanos y la dignidad de los peruano-japoneses y japoneses en 1941”.

El 14 de junio pasado el presidente de la República, Alan García Pérez pidió perdón a nombre del Estado Peruano y de toda su población en honra a los abusos cometidos durante este hecho de oprobio e ignorancia.

Salvo el gesto del presidente Fernando Belaunde, quien donó el terreno de la Asociación Peruano Japonesa a la comunidad de descendientes de la tierra del sol, a partir de allí no se observó más.

Pero tal como lo mencionan mayoritariamente los “nikkei”, más que dinero o resarcimiento económica, se valora el sentido del mensaje, y lo simbólico de seis letras “perdón”.

* Para la nota conversamos con el periodista e historiador Alejandro Sakuda, ex director del diario La República y autor del libro "El futuro era el Perú", en donde cuenta de manera extraordinaria la relación entre Japón y Perú, basándose en datos precisos que van desde los primeros inmigrantes hasta la actualidad.

Fuente: Diario La República (Perú). Vie, 22/07/2011.

domingo, 17 de julio de 2011

Israel: Guerras de 1948, 1956 y 1967 como victorias militares inequívocas y fulminantes. La guerras de 1973, 1982, 2006 y 2008 como victorias militares discutibles.

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Israel y las fronteras de 1967

Por: Farid Kahhat (Internacionalista)

Según Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel, su país no puede volver a las fronteras que existían hasta 1967 (como exige el derecho internacional), porque esas fronteras serían “indefendibles”. ¿Qué tan cierto es ese argumento?

Un criterio para responder a esa pregunta sería contrastar el desempeño militar de Israel hasta 1967 con el que tuvo después de la guerra de ese año. Hasta 1967 Israel tuvo tres guerras, en 1948, 1956 y 1967: las tres fueron victorias militares inequívocas y fulminantes (en 1967 Israel capturó la península del Sinaí en 6 días). Después de 1967 Israel sostuvo guerras en 1973, 1982, 2006 y 2008, y ninguna de ellas califica como una victoria militar inequívoca, y mucho menos fulminante (su duración fluctuó entre tres semanas y tres meses).

Esa diferencia se explica por la expansión territorial de Israel durante la guerra de 1967. Dada su estrategia de guerra preventiva, la inteligencia militar era fundamental para identificar amenazas en formación, antes de que se materializaran. Con un territorio mucho mayor por vigilar, la probabilidad de fallas en la inteligencia militar se elevó significativamente: no en vano la siguiente guerra (1973), fue la primera en la que Israel fue atacado sorpresivamente por dos de sus vecinos (Egipto y Siria). Un territorio mucho mayor implicaba también la necesidad de tropas adicionales para ocuparlo y defenderlo, además de una mayor probabilidad de que, en el futuro, Israel se viese involucrado en una guerra de desgaste (amén de que suponía un frente de combate más grande, con lo cual su capacidad para coordinar el accionar de sus tropas sería menor).

Por último, recordemos la versión oficial israelí sobre la identidad de los actores que representan hoy las amenazas más probables para su seguridad: en un destacado primer lugar se encuentra Irán, seguido a distancia por Hamas y Hezbolá. Según la propia versión israelí, la amenaza iraní se resume en lo esencial en su programa nuclear. Y frente al peligro que supone un misil portando una bomba atómica lanzado desde más de mil kilómetros de distancia, el que la frontera se fije en Jerusalén o unos pocos kilómetros hacia el este de esa ciudad resulta absolutamente irrelevante.

En menor proporción, Irán es percibido como una amenaza por su relación con Hamas y Hezbolá. Pero esos son actores no estatales que no buscan amasar un ejército en las fronteras de Israel para iniciar un ataque convencional: la amenaza que representan es aquella propia de una guerra asimétrica y aquí, nuevamente, el lugar en el cual se fije la frontera no hace mayor diferencia desde una perspectiva militar. Sí hace una gran diferencia desde una perspectiva política, dado que la ocupación de territorios árabes por parte de Israel es lo que da origen al conflicto con esos actores: Hezbolá no existía antes de que Israel ocupara el sur del Líbano en 1982, como tampoco existía Hamas antes de que Israel ocupara los territorios palestinos en 1967.

Fuente: Diario El Comercio (Perú). Domingo 17 de Julio del 2011.

sábado, 16 de julio de 2011

Historia de los Vikingos: Eric el Rojo y Leif. Aniversario del arribo de los vikingos a Norteamérica.

"Mil años de colonización vikinga en América"

Por: Isaac Bigio (Internacionalista)

Cada mediados de año se conmemora un aniversario más del arribo de los vikingos a Norteamérica, el cual se dio al inicio del segundo milenio de nuestra era.

Hasta hace poco se pensaba que los primeros europeos que se asentaron en las Américas llegaron con Colón en 1492. Según nuevas teorías, entre los primeros americanos estuvieron europeos que viajaron en kayaks contorneando los témpanos que en la edad de hielo unían a ambos continentes.

Sin embargo, de lo que sí ya hay pruebas irrefutables es sobre la aldea escandinava de L'Anse aut Medows fundada en el año 1000 por los vikingos de Leif Eircson en la punta norte de la isla canadiense de Terranova.

Los esposos Ingstad la descubrieron basándose en las sagas y mapas vikingos. Allí ellos desenterraron restos de utensilios y casas que albergaron a unos 85 colonizadores vikingos.

Durante 3 a 4 siglos más los escandinavos poblaron Groenlandia y visitaron costas de Canadá o EE.UU. En contraste con los posteriores colonizadores europeos, los nativos se mantuvieron ya sea enfrentándose o conviviendo con los vikingos. Evidencias del comercio entre ambos es una moneda del reino de Olaf de 1066-1080 desenterrada en una aldea indígena de Maine (EE.UU.).

La expansión vikinga se da cuando los escandinavos construyen los mejores barcos del Medioevo, los cuales podían transportar hasta 200 personas en largas distancias. Ellos tomaron las ciudades de York y Dublín, las que remodelaron mostrando cualidades administrativas, fundaron enclaves hasta en el África y el Mediterráneo y en los distintos ríos rusos hasta llegar al Medio Oriente. Los vikingos crearon Rus (hoy Rusia). Después de haber tomado París, el rey de Francia les ofreció a varios vikingos darles un pedazo de su país (Normandía) a cambio de su protección, aunque luego desde ésta ellos lanzarían en 1066 su exitosa conquista de Inglaterra.

Los vikingos, si bien se hicieron famosos con sus sorpresivos pillajes, fueron también un pueblo campesino, comerciante y artesano que ha impregnado a la lengua y sistema legal ingleses.

En el 870 ellos fueron los primeros en poblar Islandia, la cual poco después tuvo la asamblea democrática más antigua del mundo. La presencia escandinava en ésta transformó Islandia, que pese a estar geográficamente más cerca de América, se le considera parte de una Europa que está a una distancia 3 o 4 veces mayor.

En el año 986 Groenlandia fue colonizada por Eric el Rojo, el padre de Leif, cuya esposa fue la primera en impulsar cultos cristianos en las Américas.

Los escandinavos después de Colón tuvieron una breve presencia en las islas vírgenes que Dinamarca vendió a EE.UU., en la "Nueva Suecia"' entre Delaware, New Jersey y Pensilvania y en las Antillas francesas de Guadalupe y San Bartolomé (cuya capital Gustavia fue nombrada así en honor a un rey sueco).

Hoy hay más de 11 de millones de descendientes escandinavos en EE.UU. Allí ellos son casi el 4% de su población, aunque su número es superior al de Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia o Islandia.

Fuente: Diario Correo (Perú). 15/07/2011.

China, primer acreedor del mundo: entre la hegemonía mundial y los intereses convergentes. El nuevo papel de China en el orden mundial.

China y el nuevo sistema mundial

Por: Nathan Gardels. Director de Global Viewpoint Network/Tribune Media y NPQ. Es además asesor del Berggruen Institute.

Cuando Henry Kissinger se sentó a hablar con el presidente Mao sobre la apertura de China en los años setenta, Estados Unidos estaba en la cima de su poder. Seguramente Kissinger no pensó que, menos de medio siglo después, ahora que el Partido Comunista Chino celebra, lleno de seguridad en sí mismo, su 90º aniversario, iba a estar de nuevo en Pekín, a sus 88 años de edad, para ceder el bastón de mando de la hegemonía mundial a sus anfitriones.

Hace un par de sábados, durante la inauguración de una reunión del principal think-tank chino sobre globalización, el gran estadista comparó la China de hoy con el Estados Unidos de 1947. Después de las guerras napoleónicas, observó Kissinger, Gran Bretaña se convirtió en la mayor potencia mundial, y lo fue durante más de un siglo. Sin embargo, en 1947, Ernest Bevin, ministro de Exteriores en el ocaso del Imperio, se sintió obligado a decirle a su homólogo estadounidense: "Estados Unidos es el primer acreedor mundial y, como tal, debe tomar la iniciativa a la hora de crear el nuevo orden". A partir de ahí, se sucedieron el Plan Marshall puesto en marcha por los estadounidenses para la reconstrucción tras la guerra, el papel dominante del dólar y el ascenso de EE UU durante el resto del siglo XX.

Hoy, China es el mayor acreedor y está donde estaba Estados Unidos en 1947, a las puertas de un nuevo orden mundial. Kissinger aseguró a sus anfitriones que, aunque esta transición de un sistema a otro tardará probablemente 30 años en completarse, el papel de China crecerá sin cesar, porque está obligada, por su propio interés, a dar forma a un sistema mundial que se ha alejado del "polo del Atlántico Norte" para aproximarse al país asiático y las economías emergentes.

En opinión de Kissinger, China se verá arrastrada a ejercer el liderazgo a toda velocidad por la parálisis que sufre Occidente. Estados Unidos, dijo educadamente, "está absorto en un debate sobre el papel del Gobierno y las fuentes de vitalidad en nuestro país; cuánta intervención del Gobierno debe haber y quién debe pagarla". Y Europa está atrapada en "una crisis financiera y conceptual, suspendida entre un marco nacional y lo que debe sustituirlo".

"Es fundamental tener sentido de la cooperación", continuó Kissinger, "porque hemos entrado en una era nueva y compleja y estamos buscando un marco fundamental. Debemos adaptarnos a la incorporación de nuevos actores" en el escenario mundial. Y, para Kissinger, "el principal instrumento de adaptación es el G-20", en el que cada país debe incorporar sus aspiraciones nacionales a un acuerdo internacional, "que evite las rivalidades de suma cero en el crecimiento económico".

Kissinger tiene razón. En los dos últimos siglos, Gran Bretaña y Estados Unidos fueron las potencias hegemónicas que impusieron los "bienes públicos mundiales" de la seguridad, la estabilidad financiera, una divisa de reserva importante y el libre comercio. Hoy, Estados Unidos y las economías avanzadas del G-7 tienen cada vez más dificultades para garantizarlos. Y las economías emergentes, encabezadas por China, no pueden hacerlo todavía.

Por ese motivo, el G-20, que agrupa a las economías avanzadas y emergentes, debe ser el que, de forma colectiva, ofrezca esos bienes públicos mundiales. Es de prever que en un mundo verdaderamente multipolar, aunque China sea la primera economía en 2050, esto sea "lo normal".

El reto es si es posible establecer una gobernanza mundial sin una potencia dominante o una serie de intereses que controlen la situación. Una vía es la sugerida por Zheng Bijian, antiguo vicepresidente de la Escuela Central del Partido, autor de la doctrina del "ascenso pacífico" de China y confidente de las máximas autoridades del país. China, dice Zheng, solo puede alcanzar sus metas de "mejorar cualitativamente la vida de los chinos corrientes" y ascender en la escala de las rentas medias "en el contexto de la interdependencia".

Por consiguiente, dice Zheng, China debe dejar atrás la idea del "ascenso pacífico" para "ampliar y profundizar la convergencia de intereses con otros actores mundiales. Cuando haya una acumulación de intereses convergentes, habrá una base sólida para tener intereses comunes".

Esos "intereses convergentes" son los bienes públicos mundiales del siglo XXI. Zheng menciona en concreto la lucha contra el cambio climático y las iniciativas conjuntas sobre el crecimiento bajo en carbono, en especial con Estados Unidos.

También existen otros que el G-20 debe adoptar, como la estabilidad financiera mundial, la introducción gradual de un cesto mundial de reserva multidivisas (que incluya el renminbi, RMB) para sustituir al dólar, una nueva estructura de gobierno para el FMI que refleje el poder de las economías emergentes y una reanimación o reconfiguración de la ronda de negociaciones comerciales de Doha.

Un ámbito en el que China, como primer acreedor del mundo, podría desempeñar un papel crucial es el de ayudar a estabilizar los países de Oriente Próximo y el norte de África (MENA) mediante el desarrollo económico, algo que interesa a todo el mundo, entre otras razones por motivos de seguridad energética. Al fin y al cabo, China ya está cumpliendo una función muy importante en Europa al comprar bonos de los países que tienen más problemas.

Tras las revoluciones árabes, se habló mucho de un Plan Marshall para los países MENA. En la reciente reunión del G-8 en Deauville, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, obtuvo el compromiso de dedicar 20.000 millones de dólares a dicho fin. Pero es un compromiso que parece más bien hueco, dado que las economías avanzadas se encuentran sumidas en déficits y una crisis de la deuda soberana.

En vez de un Plan Marshall, ¿por qué no un Plan Hu Jintao auspiciado por el G-20, en el que China reutilice parte de su enorme excedente de reserva, junto con los Estados del Golfo, de manera beneficiosa para el sistema mundial?

¿Es posible, como sugirió Kissinger, que, igual que el Plan Marshall aunó las obligaciones y los intereses de Estados Unidos durante la implantación del orden mundial para la segunda mitad del siglo XX, haya llegado ahora el momento de que China asuma un nuevo papel de ese tipo? Los estadounidenses hicieron bien en escuchar a Ernest Bevin. A los chinos les convendría hacer caso a Henry Kissinger.

© 2011 Global Viewpoint Network. Distributed by Tribune Media Services.


Traducción de María Luisa Rodríguez Tapia.

Fuente: Diario El País (España). 05/07/2011.

domingo, 10 de julio de 2011

Origen y fin del Pacto de Varsovia. El Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Mutua promovido por la U.R.S.S.

El pacto que partió al mundo en dos

Por: Francisco Sanz

Más de dos décadas después del desmontaje del imperio soviético y de la caída del Muro de Berlín, aún quedan nostálgicos de aquellos tensos años del mundo bipolar. Un portal web pide a sus no pocos visitantes: “Hagamos un ejercicio de imaginación. Escriban aquí qué creen que hubiera sucedido si la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hubiera entrado en guerra contra el Pacto de Varsovia durante la Guerra Fría”.

Y mientras un internauta alucina sobre el apoyo aéreo a los combates marítimos, otro compara las armas nucleares de ambos bandos, un tercero imagina los misiles que lanzarían los bombarderos y un cuarto se interna en la propaganda y los métodos sucios de intromisión política.

Ejercicios todos que no irán más allá de la red virtual, porque lo cierto es que este viernes 1 de julio se cumplen 20 años del acta de defunción del Pacto de Varsovia, un acuerdo de cooperación militar entre los países del este de Europa bajo el liderazgo de la Unión Soviética.

RESPUESTA A OCCIDENTE

El pacto, cuyo nombre completo era Tratado de Amistad, Cooperación y Asistencia Mutua, fue firmado en la capital polaca en mayo de 1955 y constituyó una reacción 
inequívoca a la formación, seis años atrás, de la OTAN, que tenía a Estados Unidos como su buque insignia .

El ingreso de Alemania Federal, acérrimo enemigo de la URSS durante la Segunda Guerra Mundial, en 1954 al seno de la OTAN fue el detonante para la activación del pacto, que no hizo más que formalizar e integrar los distintos acuerdos bilaterales que el oso soviético había firmado entre 1945 y 1948 con los países sobre los que ejercía predominio: Albania, Alemania Democrática, Bulgaria, Checoslovaquia, Hungría, Polonia y Rumanía.

¿Por qué era importante para la URSS tener influencia sobre Europa Central y Oriental? Farid Kahhat, internacionalista y profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), ensaya una respuesta: “Porque desde ahí había sido invadida durante las dos guerras mundiales y, si nos remontamos más atrás, también en la era napoleónica. A vista de la historia, era muy importante para Moscú tener una zona de parachoques”.

El contrapeso del bloque soviético a la alianza militar liderada por Washington dio en aquel 1955 inicio formal al mundo bipolar y a la Guerra Fría.

EL ENEMIGO EN LA FAMILIA

“Curiosamente, el Pacto de Varsovia y la OTAN nunca sirvieron para su propósito original, que era enfrentarse uno contra el otro”, añade Kahhat.

El pacto echó a andar, más bien, dos veces su poderosa maquinaria militar en contra de algunos de sus miembros. La primera ocurrió en octubre de 1956 cuando el Ejército Rojo entró a Hungría y en solo dos semanas desbarató un alzamiento anticomunista que, entre otras cosas, propugnaba la salida de Budapest del tratado.

Doce años más tarde, en un episodio mucho más conocido, las fuerzas del pacto ingresaron a sangre y fuego a Checoslovaquia para marchitar la llamada Primavera de Praga. Se castigaban, así, las reformas que estaba poniendo en marcha el Gobierno Checoslovaco y que, según la URSS, pretendían erradicar el modelo socialista.

En ambas ocasiones se invocó la doctrina Brezhnev, que guiaba la política exterior soviética, para actuar: “Cuando hay fuerzas que son hostiles al socialismo y tratan de cambiar el desarrollo de algún país socialista hacia el capitalismo, se convierten no solo en un problema del país concerniente, sino en un problema común que atañe a todos los países socialistas”.

Fue otro líder soviético, Mijaíl Gorbachov, quien de la mano con el glasnost y la perestroika mandó al tacho tal doctrina y la reemplazó por otra que fue bautizada, horror de horrores para los antiguos jerarcas de Moscú, como la doctrina Sinatra. Al mismísimo estilo de “My Way”, el pacto dejaba a sus integrantes en libertad para actuar según su propia conveniencia.

A partir de 1989 el tratado entre las naciones de Europa del Este empezó a desmoronarse y perder sentido. Kahhat, agudo, no puede dejar de señalar el vuelco en muchos de los que firmaron el pacto: “Hoy no solo son miembros de la OTAN, la antigua alianza enemiga, sino que representan la derecha de la Unión Europea. Los partidos conservadores y xenófobos son mucho más fuertes en la Europa Oriental que en la Occidental. Es un cambio radical en toda regla, aunque algunos comunistas hayan logrado reciclarse como socialdemócratas”.

Fuente: Diario El Comercio. Domingo 26 de Junio del 2011.

El Fascismo europeo. Franco y el fascismo español.

El Fascismo

Por: Juan Pedro Amorós (Historiador español)

Les diré que España en 1936, fecha del golpe de estado que dio lugar a la guerra civil, era un país dual. Es decir, un país que estaba en sus primeras fases de desarrollo importante y tenía dentro de sus fronteras zonas de diferente nivel de desarrollo socio-económico.

Si admitimos que el fascismo es un movimiento político totalitario que busca ese hombre nuevo ( ), sometido desde los mismos cimientos de su vida más privada, vemos que es un sistema propio de países de cierto nivel de desarrollo industrial. Entiendo por fascismo la crisis del liberalismo decimonónico, es decir, el miedo de los antaño liberales burgueses que tenían controlada la situación: control del movimiento obrero sin apenas derechos, el orden público sujeto y, un optimismo en el futuro. Ese optimismo se acaba al acabar la Primera Guerra Mundial. Entre 1914 y 1919 irrumpen las masas en la escena social y el burgués se echa a temblar. Por su parte los mecanismos del capitalismo manchesteriano y su famosa “mano invisible correctora de los abusos del mercado” entran en crisis fuerte.

Esa crisis afecta a todo occidente desarrollado de entonces. Lo que ocurrió es que los países con tradición más democrática pudieron capear mejor el temporal. La solución era más democracia (socialdemocracia) y keynesianismo económico (welfare state). Por ello, Francia, Gran Bretaña y USA apenas sufrieron la crisis y el fascismo no asustó en esos países.

Por el contrario, los países recién formados y con problemas nacionales, en una época en plena tensión racial ( ) fueron muy afectados, además de ser países que habían perdido la guerra (Alemania, Austria), o países frustrados por no haber visto mejores fronteras (Italia). En estos casos el nacionalismo es fundamental.

Los países mediterráneos del sur, mayoritariamente preindustriales apenas tuvieron fascismo y sí autoritarismo pleno, en el que no se intenta convencer, sino que se impone de cualquier forma, por la “manu militari”. Los campesinos sin tierra, embrutecidos por niveles de vida cuasi feudales de los latifundios del sur español, italiano o griego o portugués eran, simplemente, fusilados sin más. Si se lee la historia de la Italia de la II Guerra Mundial, el sur liberado desde 1943, era monárquico, pero el norte industrial y desarrollado, era plenamente fascista, con la terrible República de Salo, mussoliniana.

El autoritarismo es diferente por ello. No llega al nivel del fascismo, que inventa un lenguaje pseudomoderno, puesto que se las ve con el campesinado atrasado.

Vayamos al caso español que ahora nos ocupa. Si se ha leído algo de este país, se verá que había en esos años una sociedad urbana en ciudades como Madrid o Barcelona, plenamente moderna, con amplia clase media secundaria y terciara, clases medias asustadas y fácilmente adictas al discurso simplista aunque maquillado del fascismo. En el sur, en regiones como Andalucía o Extremadura, el nivel de vida apenas difería mucho del siglo XVI. Un campesino extremeño de Trujillo apenas había cambiado su nivel de vida respecto a sus antepasados conquistadores. La oligarquía solo se preocupaba de mantener sus fincas, casi señoríos feudales.

Vayamos ahora al franquismo. ¿Era un régimen fascista? o ¿era autoritario? Tras la derrota de 1945 el fascismo quedó al descubierto. Por ello muchos prefieren decir autoritarismo, que es menos impresentable ante la opinión pública. En el franquismo estaban ministros y tendencias autoritarias y tendencias fascistas.

Si se lee algo de aquella terrible guerra, se verá que en el sur fue muy violenta, una lucha de clases pura y dura, una guerra de aniquilamiento a las bravas. En las ciudades, también fue muy violenta pero los objetivos fueron muy diferentes.

Tras la guerra, el franquismo aniquiló cualquier oposición con exterminio brutal. Una escuela de historiadores profesionales españoles y de hispanistas anglosajones, está desvelando este tinglado y concluyen que Franco masacró y aniquiló lo que pudo, incluso mucho más en proporción que Hitler. Lo que ocurrió es que apenas tenía métodos, dado lo prehistórico del país. No tuvo gas ciclón como en Austwicht o en Dachau, pero sí hubo terribles matanzas en campos de exterminio españoles, imitación castiza de aquellos alemanes.

Si se viese los discursos de los pseudointelectuales del régimen apenas hay un discurso elaborado como los diabólicos de Goebbels u otros. Franco era un inculto, un militar mediocre y anticuado, un castizo español (sin ni siquiera bachillerato) que nada tenía que ver con el nivel medio de sus colegas italoalemanes. Hitler tenía ciertos estudios artísticos de la vanguardia vienesa de los años veinte, y Mussolini era maestro.

Intentó Franco imponer un sistema totalitario de economía cerrada nacionalista en unos años en que el sistema económico nuevo, de Bretton Woods o de librecambismo del FMI, impedía el desarrollo de esas economías autárquicas. El resultado fue un país aislado y subdesarrollado más próximo al modelo tercermundista que al de país desarrollado occidental.

En los años 60 la sociedad cambió con el liberalismo económico, similar al resto de países subdesarrollados de la orilla norte mediterráneo (Grecia, sur de Italia, Portugal) y se llegó a dar el salto irreversible al desarrollo. Por ello, en 1975 la sociedad española ya era una sociedad de clases medias con un régimen dictatorial que solo esperaba la muerte de su creador para librarse de él. El régimen era un cascarón que se cae definitivamente.

Mi pensamiento es que intentó ser fascista, pero no pudo serlo, pues tuvo que coincidir con el final de aquellos países que lo crearon.

Entonces si hoy hace ya más de medio siglo de aquello ¿no haya fascismo? Claro que sí. Por ejemplo creo que el modelo perfecto era el Chile pinochetista o la Argentina de los generales Videla o Galtieri.

(1) Lo de hombre nuevo es una mentira. En realidad el fascismo es el intento del viejo mundo de conservar sus privilegios. Las grandes burguesías nacionales alzaron a estos regímenes para que les defendiese de la amenaza de las masas y del sistema que decía ampararlas: el bolchevismo de aquellas épocas. También, como el caso español, los anarquistas. El fascismo tiene un elaborado discurso populista, pseudomoderno y medidamente anticapitalista, para poder atraerse a las masas desheredadas sin ideología de clase. El fascismo era el tradicionalismo maquillado, puesto al día o actualizado en aquellos años del primer tercio del siglo XX.


(2) Lo de tensión racial era una bobada, pues en aquella época no había aún una sociedad multirracial como hoy en Europa occidental. Los judíos eran el elemento diferente. ¿Qué hubiera pasado si viesen hoy el mosaico de razas y culturas por sus calles?

Fecha: Julio del 2011.
 
Recomendados:
 
Concepto de Fascismo. Distinción entre Autocracias y regímenes fascistas. El fenómeno del totalitarismo, y las ideologías fascistas.
 
Fascismo Europeo. Prats, Historia del Mundo Contemporáneo, Edit. Anaya, Madrid 1996. p. 90.

jueves, 7 de julio de 2011

Machu Picchu, historia de su construcción. Pachacútec y el origen de Machu Picchu.

Machu Picchu: 550 años

Por: Antonio Zapata (Historiador)

Ahora que los medios celebran los primeros 100 años de Hiram Bin-gham, conviene recordar que la construcción de Machu Picchu data de 1450-1480. El soberano reinante era Pachacútec, quien venía de obtener la victoria sobre los chancas que permitió construir el Tawantinsuyu. A continuación, el inca conquistó a los collas y extendió su dominio al altiplano. Se detuvo y asoció a uno de sus hijos como corregente. Como el incanato requería un guerrero que termine el ciclo de conquistas, Pachacútec escogió al joven Túpac Yupanqui, quien condujo la gran expansión imperial como jefe militar.

Una vez aprobado este nombramiento, Pachacútec se autoimpuso otra misión. El inca viejo entendió que fundar un imperio implica una obra de renovación espiritual de la elite. Pachacútec quiso conectar el dominio político con una transformación ideológica que le conceda fuerza anímica a la aristocracia inca. Por ello, fue el promotor de la divinidad solar. Elevó su importancia en el panteón andino, especializando a su familia en el culto. Los suyos fueron los sacerdotes y guerreros por excelencia.

Durante su reinado, Pachacútec fue un esforzado arquitecto y urbanista. La misma capital cusqueña fue objeto de una profunda reconstrucción. Al terminar el nuevo Cusco y definir sus elementos característicos: plaza, barrios, caminos y templos, Pachacútec construyó su propia hacienda real. Ese fue el momento de Machu Picchu.

Los soberanos imperiales dispusieron de este tipo de propiedades que la etnohistoria ha llamado “haciendas reales”. Por ellas se entiende tierras y servidores que pertenecían a la familia ampliada del soberano, llamada “panaca”. Este grupo conservaba la momia y el culto del inca una vez fallecido y se encargaba de su eterno culto.

Como parte de su propia hacienda, Pachacútec construyó un gran complejo, que incluía varias estaciones preparatorias que se hallan a lo largo del llamado Camino Inca. La más importante es una serie de fuentes y andenes en un lugar encantado llamado Wiñay Huaina.

Más adelante, en la cima de Machu Picchu se halla una cantera de granito blanco, muy dúctil y elegante, apropiado para la construcción. Además, el cerro asociado, el Huayna Picchu, termina una línea de montañas que empieza en el gran nevado llamado Salcantay, uno de los Apus mayores del Cusco.

Por lo tanto, Machu Picchu culmina un circuito sagrado. La muralla exterior lo aísla de la zona profana y adentro es una reproducción a escala del mismo Cusco. La plaza separa dos barrios, arriba y abajo, los templos se hallan a cada lado y los andenes también. El centro religioso llamado “torreón” es una reproducción en miniatura del Coricancha del Cusco, donde hoy se levanta la iglesia de Santo Domingo. Esas paredes semicirculares de piedra finamente encajada constituían el mayor de los orgullos de los arquitectos incas y se las reservaban a sus centros ceremoniales principales.

Pachacútec construyó Machu Picchu para visitarlo periódicamente, desarrollar ceremonias y cálculos astronómicos. Durante sus ausencias, el sitio estaba al cuidado de un conjunto de servidores, cuyos restos y ajuares funerarios acaban de ser devueltos por la Universidad de Yale. Entre otros, destacan pequeñas campanitas, de uso personal, y también sahumerios muy gastados. Ambos objetos nos permiten imaginar las fiestas rituales de los incas, marcadas por inciensos, olores aromáticos y ritmos musicales.

A 100 años de Hiram Bingham, el público conoce poco de la historia de Machu Picchu. Bien valdría la pena esta celebración para difundir su conocimiento científico, que obviamente contradice las absurdas leyendas que esparció, desde el primer momento, su supuesto descubridor científico.

Fuente: Diario La República (Perú). Mié, 06/07/2011.

Recomendado:

Análisis de la estructura de Machu Picchu. Constructores de "estructuras líticas sismorresistentes, que conjugan la biodiversidad natural de su entorno".

domingo, 3 de julio de 2011

Historia de los afroestadounidenses. George Washington Williams y George Washington Carver, forjadores negros de la nación norteamericana.

Dos George Washington y UNA CASA BLANCA

El 4 de julio se conmemora el aniversario 235 de la independencia de los Estados Unidos. En las lides libertarias, y luego en la construcción y unificación de esta nación, los afroamericanos jugaron un importante papel.

Por: Maruja Muñoz Ochoa. Investigadora de la cultura afroperuana

Se estima que al menos cinco mil soldados negros lucharon en el bando patriota por la libertad de los Estados Unidos. Baron von Closen, del ejército francés de Rochambeau en Yorktown, escribió en sus memorias: “Una cuarta parte de ellos [el ejército estadounidense] son negros, alegres, seguros y robustos.”

Este año en su discurso por el Mes Nacional de la Historia Afro, que giró en torno la contribución de la población negra en la guerra civil, el presidente Barack Obama expresó: “Decenas de miles de afroestadounidenses se alistaron en el Ejército y la Armada de Estados Unidos, haciendo extraordinarios sacrificios para ayudar a unificar un país fracturado y liberar a millones de la esclavitud. Los afroestadounidenses han fortalecido nuestro país al encabezar las reformas, superando obstáculos y rompiendo barreras”. Dos de estos héroes llevaron el nombre del primer presidente de Estados Unidos: George Washington.

El historiador

Tras participar en la guerra civil americana, George Washington Williams marchó a México, donde se alistó para combatir a Maximiliano I. Regresó a su país en 1867, estudió leyes en la Universidad Howard, exclusiva para afroestadounidenses, y al graduarse fue ordenado ministro de la Iglesia Institución Teológica Newton. Fue el primer diputado negro en la Cámara de Representantes de Ohio y escribió pioneros textos históricos sobre la población negra de su país: en “The History of the Negro Race in America 1619-1880” (La historia de la carrera negra en América 1619-1880) y “A History of the Negro Troops in the War of Rebellion” (La historia de las tropas negras en la guerra de rebelión) recoge testimonios de abolicionistas y combatientes de la guerra civil.

Cronista en el Congo

Interesado en el proyecto de creación del Estado Libre del Congo, este otro George Washington viajó al África y descubrió las atrocidades perpetradas contra los nativos de la zona.

Mediante una serie de artículos periodísticos y su famosa “Carta abierta a su serena majestad Leopoldo II, rey de los belgas y soberano del Estado Independiente del Congo”, él se convirtió en el primer occidental en revelar al mundo el trato brutal de los belgas contra los congoleños.

Washington Williams Falleció en circunstancias extrañas durante una escala en Inglaterra que hizo el barco que lo transportaba de regreso a Norteamérica.

Da Vinci afro

George Washington Carver tenía una semana de nacido cuando fue secuestrado, junto con su madre y una hermana. Según la colección histórica “Shapers of America” (Forjadores de América), de Richard Rennert, el amo de este otro George Washington y de su familia fue Moses Carver, un alemán afincado en Missouri. Tras el secuestro, el alemán contrató al deportista John Bentley para que buscara a sus esclavos. Cuando los ubicó, el pequeño estaba moribundo y su madre y hermana habían fallecido. El propio Carver negoció con los maleantes, recuperó al bebe a cambio de un caballo y lo adoptó para que recibiera instrucción.

En 1891, por su talento e inteligencia, logró ingresar a la Facultad de Botánica de la Universidad Estatal de Iowa. Fue el primer estudiante negro en la historia de ese centro. George Washington Carver se convirtió en un reputado profesor, investigador e inventor. Revolucionó la agricultura con técnicas para aprovechar mejor el suelo y desarrolló la variedad de algodón híbrido de Carver. Del maní obtuvo más de 300 productos, entre alimenticios (aceite, harina y queso) e industriales (tintes, jabones y plásticos). Del camote extrajo pegamento y caucho sintético, entre otros casi cien productos. Con tierra y aceite de soya desarrolló pigmentos azules, purpúreos y rojos con los que pintó varios cuadros que fueron premiados. La Real Sociedad de las Artes de Londres lo nombró socio de honor en 1917 por la excelencia de sus pinturas.

En 1939 recibió la medalla Roosevelt por su sobresaliente contribución a la agricultura del sur. En la medalla figuraba la inscripción: “Para un humilde científico que busca la dirección de Dios y un libertador para los hombres de la raza blanca así como la negra”. La prensa norteamericana lo bautizó como el Leonardo Negro, al compararlo con Leonardo da Vinci.

Alcanzó fama y los empresarios, industriales y hasta presidentes de su país lo buscaban para consultarle sobre temas científicos, tecnológicos y económicos. Henry Ford fue su gran amigo y como un homenaje construyó en su museo particular una réplica de la cabaña donde nació Carver. Cada 5 de enero –día de su muerte– se conmemora en Estados Unidos el Día de Reconocimiento de George Washington Carver.

La ciudad de la Casa Blanca

“Científicos e inventores negros”, libro de Publicaciones BIS (Reino Unido), sostiene que miles de ciudadanos afroestadounidenses han contribuido al desarrollo mundial, sin recibir reconocimiento. Benjamin Banneker, por ejemplo, resalta por ser astrónomo, inventor y matemático, pero nunca se recuerda que diseñó, ni más ni menos, Washington D.C., la capital de los Estados Unidos.

Fue en 1791 que los padres de Norteamérica –George Washington y Thomas Jefferson– le solicitaron al arquitecto francés Pierre Charles L’Enfant el trazado de los planos de Washington D.C. Al año siguiente, L’Enfant, cansado de los frecuentes altercados con las autoridades municipales, renunció y se llevó sus planos. Fue Benjamin Banneker, su asistente negro, que conocía esos planos de memoria, quien los recreó. Así, se convirtió en el verdadero diseñador de la ciudad de la Casa Blanca, que hoy alberga a un afrodescendiente.

Fuente: Diario El Comercio, suplemento cultural "El Dominical". 3 de Julio del 2011.

Historia de la desintegración de antiguas colonias y países independientes. Divisionismo y Unionismo de las naciones y países.

"¿Nueva Confederación Peruano-Boliviana? "

Por: Isaac Bigio (Internacionalista)

El presidente electo del Perú antes de asumir oficialmente el cargo estuvo en La Paz donde declaró que él quisiera hacer renacer a la Confederación Peruano-Boliviana de 1836-39.

Este planteo, así como otros referentes a política externa, estuvo ausente en el debate electoral presidencial. Sin embargo, en caso de pasar de ser un deseo a empezarse a buscar implementarse ello implicaría generar una tendencia unionista contrapuesta a la del mundo actual.

Hasta la fecha la dinámica de Hispanoamérica no ha sido la de reunificar diversas repúblicas sino a una mayor fragmentación. Del México postcolonial de 1821 se le escindió la federación centroamericana que poco después se fragmentó en 5 nuevas repúblicas, y luego Texas pidió su independencia para que ésta y más tarde el norte mexicano sean anexados a EE.UU.

En 1830 la Gran Colombia se dividió entre Venezuela, Ecuador y Colombia (de la cual en 1903 se escindiría Panamá). Los intentos de mantener unido al antiguo Virreinato de la Plata han fracasado como también toda posibilidad de unir a las antiguas colonias españolas del Caribe.

La isla Española hoy está escindida entre las repúblicas dominicana y haitiana. Las Antillas españolas fueron capturadas por EE.UU. en la guerra de 1898 dejando luego que Cuba se independizase, aunque una zona de ésta (Guantánamo) y Puerto Rico siguen bajo administración de Washington.

La tendencia a la atomización se ha exacerbado en el resto de las Antillas.

La Federación de las Indias Occidentales de 1958-62 dio paso a 14 países (la mayoría bajo el reinado de Elizabeth II, aunque sólo 4 como sus semiautónomas dependencias). Las Indias Occidentales Holandesas se han ido fragmentando a medida que la mayor parte de las 6 islas que las componen han votado por su separación.

A nivel mundial, por un lado, hay una tendencia a conformar bloques regionales pero, por otro, a la de la fragmentación de los Estados. Hasta hace medio siglo, la mayoría de los 54 países del África estuvieron unidos bajo la administración de Francia o Gran Bretaña.

En el Asia occidental al menos 8 nuevos países surgieron en la descolonización. La antigua India británica está hoy dividida en 5 repúblicas y la Indochina francesa en 3.

Desde hace 2 décadas las 3 federaciones "socialistas" de Europa del Este se han atomizado dando paso a 23 nuevos miembros de las Naciones Unidas, mientras que hay otros más que piden entrar a ésta.

Países que pueden reclamar un pasado nacional común (como Austria y Alemania o varios de Arabia) siguen separados. Los intentos de Libia, Egipto o Siria de unificarse entre ellos o con otros vecinos han colapsado.

Países como Gambia, Suazilandia, Mónaco, San Marino o Vaticano, pese a estar enclavados dentro de una nación mucho más grande, han persistido en mantener su independencia.

Tres excepciones a esa regla son las reunificaciones de Vietnam, Alemania y Yemen, aunque estos 3 casos son los de naciones históricas que mantuvieron una temporal división debido a que distintas partes de su territorio optaron por modelos socioeconómicos diferentes durante la Guerra Fría.

Fuente: Diario Correo (Perú). 29/06/11.

viernes, 1 de julio de 2011

Concepto de Fascismo. Distinción entre Autocracias y regímenes fascistas. El fenómeno del totalitarismo, y las ideologías fascistas.

El fujimorismo: autocrático sí, fascista no

Por: Ariel Segal (Internacionalista)

En su reciente artículo “La derrota del fascismo” (LR, 20/6/11), Mario Vargas Llosa califica de “fascista” al fujimorismo y como alguien que se ha dedicado a estudiar el fenómeno del totalitarismo, y las ideologías fascistas, pienso que es bueno señalar mi discrepancia con esa definición y utilizar la más correcta: autocracia.

Este desacuerdo no me parece solo parte de un debate teórico, ya que la distinción de qué tipo de tiranía enfrenta una sociedad puede ser determinante para derrocarla antes de que los ciudadanos de un país se vean sometidos a un totalitarismo difícil de extirpar. No fue lo mismo sacar del poder a Fujimori o, incluso, a Pinochet, a quien se le obligó a aceptar un referéndum, que intentar salir de regímenes fascistas como los de Hitler y Mussolini, e incluso la ex Unión Soviética, que tuvo una larga y agónica implosión.

El origen del término “fascismo” surgió en Italia en los años 20 del siglo pasado y fue adoptado por el dictador Mussolini, quien en el texto llamado La Dottrina del Fascismo, junto a su ideólogo Giovanni Gentile afirmaron que “para el fascismo todo está dentro del Estado y nada humano o espiritual existe ni tiene valor fuera del Estado, en ese sentido el fascismo es totalitario”. El régimen de Hitler en Alemania consagraría esta realidad con un sistema totalitario que no solo copó las instituciones políticas y económicas de la nación, sino también todas las esferas de la sociedad, convenciendo a las masas a entregarse a la causa de una ideología racial.

El Estado totalitario fascista propone la creación del hombre-masa conducido por un líder mesiánico y no hace distinción entre la esfera pública y privada. Por eso, a diferencia de una dictadura, no solo quien se opone al gobierno sufre de represión o persecución, sino cualquiera que se atreva a hacer algo contra los valores del “hombre nuevo” que se plantea crear. Estoy seguro de que MVLL conoce el tema, y sabe que el fascismo es una ideología corporativista, por lo que se opone a las doctrinas del liberalismo político y económico. Cuando señala que el régimen de Fujimori-Montesinos fue popular y tuvo apoyo de la clase empresarial por su política de libre mercado, sin darse cuenta se contradice; y cuando indica que también fue muy popular en los sectores rurales y lumpen “ganados mediante políticas asistencialistas de repartos y dádivas”, no precisa que eso también ocurre en gobiernos populistas, como el de Lázaro Cárdenas en México, Perón en Argentina o Velasco Alvarado en el Perú; todos autócratas, por el origen o su estilo de gobierno, pero no necesariamente fascistas.

Concuerdo en que el régimen Fujimori-Montesinos durante ocho años, violó los DDHH, acaparó los medios, se vinculó al narcotráfico, perpetuó masacres contra civiles y manipuló la Constitución y las leyes al servicio de una cúpula corrupta que intentó perpetuarse en el poder. Todo esto tipifica, ciertamente, a un Estado criminal y dictatorial, pero no fascista, puesto que si bien todo lo anterior puede ser parte de este tipo de régimen, el fascismo implica muchas otras características como: sistema de partido único con una ideología adoptada casi como si se tratase de una doctrina religiosa, lo cual se difunde no solo por medio de la propaganda sino del adoctrinamiento sistemático, sobre todo de niños y jóvenes; concepción totalitaria y corporativista del Estado; xenofobia y discriminación a minorías étnicas, religiosas y nacionales; expansionismo y militarismo, lo cual conlleva a un nacionalismo exacerbado que identifica a la tierra, al pueblo y al Estado con el partido y su líder; culto a la personalidad del caudillo; visión de una sociedad utópica perfecta con “un hombre nuevo” con un pensamiento único, sumiso al régimen totalitario.

Quizá MVLL ha caído en la tentación de calificar a la dictadura de Fujimori de neofascista porque el ex dictador fue de derecha, y como él mismo lo expresa, el fascismo “es una palabra que ha sido usada con tanta ligereza por la izquierda, más como un conjuro o un insulto contra el adversario que como un concepto político preciso…”. ¡Y es cierto! Solo a partir de los años 60, pensadores como Hannah Arendt y Raymond Aron, entre otros, desmontaron el hábito de categorizar únicamente a regímenes de derecha como fascistas, al demostrar que, en la práctica, la URSS, China comunista, Cuba, etc., también tenían este modelo político.

Pienso que es pertinente ahondar en un debate que permita distinguir un tipo de tiranía de otra porque el diagnóstico correcto que distingue al abuso de poder de la autocracia, y de ésta al fascismo, puede hacer la diferencia entre estar a tiempo o no de detener a gobiernos con tentación totalitaria como los que hoy, con vestimentas “revolucionarias”, aún proclaman eslóganes que incluyen a la “muerte” como un valor fundamental.

No tengo la respuesta ni tampoco la requiero de don Mario. Simplemente, creo útil ahondar en un debate que permita distinguir un tipo de tiranía de otra, no solo por razones históricas, como ocurre ahora en España a propósito del apasionado debate sobre la naturaleza del régimen de Francisco Franco luego de que la Academia de la Historia lo definiera como dictatorial y no totalitario, sino porque estoy convencido de que el diagnóstico correcto, que distingue al abuso de poder de la autocracia y de ésta al fascismo, puede hacer la diferencia entre estar a tiempo o no de detener a gobiernos con tentación totalitaria que actualmente, como hicieron los fascistas de la falange española que apoyó a Franco, proclaman: “¡Viva la muerte!”.

Fuente: Diario La República (Perú). Vie, 01/07/2011.

Estudios de etnicidad y género en el Perú. Entrevista a Maribel Arrelucea: "Nuestra historia es política-militar-masculina".

A reescribir la historia

Por: Marco Fernández

“Las mujeres somos las indicadas para asaltar la historia”, dice la historiadora Maribel Arrelucea Barrantes, quien el martes 21 de junio dictará la conferencia “Afroperuanas: estereotipos y realidades” en el Británico de Miraflores.

Como parte del festejo en reconocimiento al aporte cultural de los afroperuanos, Maribel Arrelucea Barrantes se une como conferencista para tratar el tema de los estereotipos sobre las afrodescendientes en el Perú. Gran parte de su conocimiento acerca de este tema podemos encontrarlo en su libro “Replanteando la esclavitud. Estudios de etnicidad y género en Lima borbónica” (Cedet, 2009), que desde su título nos enseña (“Replanteando”) que la historia se encuentra en constante reescritura. En su libro, habla de seres de carne y hueso con nombre propio, influenciada por Alberto Flores-Galindo, quien, a decir de Arrelucea, es el primero que nos muestra a personajes con nombre propio.

—Usted dice que Tito Flores-Galindo ve que entre los grupos étnicos indios y afroperuanos hay mucha violencia, que usted no ve.

—Creo que la razón fundamental por la que él tiene una mirada muy violenta de las sociedades limeñas es por las fuentes que utiliza, que son básicamente judiciales.

—¿Como leer solo las páginas policiales de los periódicos?

—Sí. Él observa, por ejemplo, el caso de los pescadores de Lima que por su mismo trabajo tenían comunidades muy cerradas. En cambio, él no observa al indio de la ciudad, que se vincula más a la sociedad; es muy diferente del indio de comunidad. Esa mirada tan violenta a la ciudad marca sus páginas. Lo que más le sale a él, lo mejor que pinta es la población esclava de Lima, porque te muestra personas de carne y hueso, con nombre propio. Eso me ha influenciado, el buscar personas, encontrar la lógica de cómo las personas viven teniendo encima la carga racial, los discursos estamentales (donde cada cual ocupa su lugar en la sociedad).

—Dice usted que debemos erradicar el concepto de los hombres como héroes capaces de acciones sobrenaturales.

—Una cosa que yo critico mucho son los discursos históricos en los textos escolares. Nuestra historia es política-militar-masculina. Nuestra lista de héroes es larguísima, especialmente de la Guerra con Chile; es un patriotismo enfermizo, porque enfatizamos mucho al héroe perdedor, que al final de cuentas no gana batallas. Como Bolognesi.

—Los intelectuales han pecado de machismo.

—Cuando hay intelectuales mujeres, las minimizan o las colocan por debajo. Cuando entré a trabajar a la Pre San Marcos, me pidieron que me maquille, que use tacos, que use traje sastre… ¿Por qué tengo que imponerme por elementos externos? La ropa, el maquillaje, el moño… todo eso tiene que ver con nuestros estereotipos de lo que es una mujer.

—Estereotipos… de eso trata la conferencia que dará este martes. ¿Qué propone?

—Lo que me interesa es mostrar cómo se construyen esas imágenes estereotipadas sobre la mujer negra, que, se dice, es libertina y lujuriosa y, al mismo tiempo, buena lavandera, cocinera, bailarina, y ver el proceso histórico de cómo se va consolidando esa imagen.

—¿De dónde toma usted la idea de que los afroperuanos son considerados como analfabetos y pobres?

—De las encuestas, del racismo de las noticias, de los comentarios en blogs, de los chistes cotidianos… He viajado y hecho trabajo de campo en diversos lugares…

—¿El “Negro Mama”, del comediante Jorge Benavides?

—Yo veía al Negro Mama y me reía. Luego analicé el porqué y me di cuenta de que reforzaba todos los estereotipos que tenemos sobre la población afro, por más que uno diga “yo no soy racista”, es algo que hemos heredado. Y yo soy afrodescendiente, por el lado de mi padre. Yo creo que el gran reto es hacer humor en el Perú sin reforzar estereotipos. Aunque hay que cosas interesantes en la obra de Benavides: el Negro Mama no es malo…

—Pero volvamos a las mujeres; hay que situarlas en el lugar, rescatarlas del olvido. ¿Cómo?

—Hay varios frentes para trabajar. Un primer frente es volver a escribir la historia. Es el papel de las intelectuales… y de los intelectuales. Así como los afros y los amazónicos deben asaltar el campo intelectual, pensar desde adentro, a partir de una mirada interior, creo que las mujeres somos las indicadas para asaltar la historia. Escribirla incluyéndonos. Creo que eso también puede partir de historiadores; el caso es tener la sensibilidad y la mirada para hacerlo.

Fuente: Diario La Primera (Perú). 19 de junio del 2011.